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¿Ves allá esa mujer? Si, aquella mujer Que junto a su ventana Contempla ensimismada la lejanía del horizonte, como si allí estuviera estampada la figura de aquel hombre que la hiciera desgraciada. A aquella mujer, yo la amé, con todo el amor del alma, pero su cruel destino le desvió el camino, y en lugar de amarme dió su amor a un canalla. Ella quedó embarazada, siendo para sus padres una terrible afrenta, fue lanzada a la vida sin piedad y sin clemencia. Dando vueltas por el mundo maltratando su inocencia, recibiendo golpes rudos pudo tener a su hijo, producto de su vergüenza. Por ser tan débil mujer su dolor la doblegó, perdiendo así la razón, no tuvo la suerte de ver a su hijo en crecimiento, sólo en su pensamiento como le viera nacer. Con el niño entre sus brazos canta siempre una canción y entre sonrisas y llantos le cobija en su regazo muy cerca del corazón. Yo, la contemplo desde lejos, tratando de penetrar en su profundo mirar, hasta ver si en su recuerdo queda algo de mi amor, que fue pureza y lealtad. Pero, amigo...¡que va! Sigue ajena a mi tormento, arrullando a su tierno consolando su llorar, que su padre anda muy lejos, pero que ha de regresar. Esta tristeza quiebra mi alma, al ver que en ese muñeco, vuelca todo un sentimiento, saber que besa un falso niño que puede ser verdadero, como lo es este amor mío por esos ojos tan ciegos. Es una pena, ¿verdad? Contemplar algo tan tuyo que vive en un sueño oscuro, sin poderlo despertar, Es una pena, ¿verdad? Carmen Flores Poeta de la ternura Cabo Rojo - Puerto Rico - 1967 www.angelfire.com/poetry/carmenflores
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