Cuando me sentí por ti amada
éste corazón, locamente palpitaba,
todo mi ser resplandecía,
todo mi ser te adoraba...
Y llevaba por vestido... ¡luces de colores!
la vida sonreía...
estaba enamorada!

El fuego de tu voz y la pasión de tu mirada
en mi alma lo grababa...
y la foto aquella... donde para mi sonreías
escondida en mi pecho a todas partes la llevaba,
nunca quise pensar en posibles dolores,
era imposible... me decía
que un amor así, se perdiera en la nada.

Convertirte en un recuerdo quieto
no es tarea fácil, ni grata...
retirar los diamantes en mi pecho
del infinito amor esperanzado
ha sido mi más grande reto,
es querer detener una catarata
es cambiar el curso de un río... cambiar el lecho,
parar el vuelo del cóndor cansado...
vaciar las lágrimas y dejar mis ojos secos.

Mirarlas una a una como perlas que brotan
y despedirte para siempre... con un adiós...
con un adiós, sin retorno posible
y la vida seguirá indiferente,
marcando acompasadas su notas,
cubriendo en un tic tac, impredecible
la pena de un amor y su derrota...

Matty Canales
Santiago - Chile