Serie: Las Divas del Tango

 

Beba Bidart - (1923-1994) Intérprete

 

LA CUMPARSITA
(Gerardo Matos Rodríguez / Pascual Contursi / Enrique Pedro Maroni)

 

Tango que me hiciste mal
y sin embargo te quiero,
porque sos el mensajero
del alma del arrabal.
No sé qué encanto fatal
tienen tus notas sentidas,
que en la mistonga guarida
el corazón se me ensancha
como pidiéndole cancha
al dolor que hay en mi vida.

 

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Si supieras
que aún, dentro de mi alma,
conservo aquel cariño
que tuve para ti...
Quién sabe si supieras
que nunca te he olvidado,
volviendo a tu pasado
te acordarás de mí...

 

Los amigos ya no vienen
ni siquiera a visitarme,
nadie viene a consolarme
en mi aflicción...
Desde el día que te fuiste
siento angustias en mi pecho,
decí, mi vida ¿qué has hecho
de mi pobre corazón?

Al cotorro abandonado,
ya ni el sol de la mañana
asoma por la ventana
como cuando estabas vos,
y aquel perrito compañero
que por tu ausencia no comía,
al verme sola, el otro día,
también me dejó...

Sin embargo,
yo siempre te recuerdo
con el cariño santo
que tuve para ti.
Y sos en todas partes,
pedazo de mi vida,
la ilusión querida
que no podré olvidar.

BEBA BIDART: EL TANGO HECHO MUJER
por Alberto Peyrano

Nació en 1923. Ya a los 4 años de edad se acercó al teatro Infantil Labarden y se inició en los escenarios con obras y comedias para niños, integrando el elenco de esa compañía. A los 15 años debutó como corista en el teatro y poco después como vedette. Beba fue, desde el comienzo, una persona consagrada a dedicar su vida al Arte y nunca dejaría de hacerlo, hasta su temprana y lamentada desaparición. En 1947 la pantalla grande nos mostró por primera vez su imagen. Tal vez sin demasiadas dotes vocales, pero sí con sentimiento, con un fraseo perfecto, con garra cuando hacía falta, con ternura casi siempre, su voz fue tango. Pero garra, poema, estrofa y fraseo se trasladaban a sus piernas cuando bailaba. Beba fue una institución de la milonga, un símbolo de la complicada y sensual danza de Buenos Aires, que dejaba sin habla a quien la viera. Profesional como pocas, su parternaire más famoso fue Tito Lusiardo y la imagen de ambos bailando "La trampera" cabeza a cabeza, quedadará grabada para siempre como un recuerdo entrañable e imborrable. Tal vez por ello se motivó Mariano Mores a dedicarle "Taquito Militar", milonga que fuera bailada por nuestra estrella con varios presidentes, desde Perón hasta el riojano, aunque a este último le aclaró que ella bailaba como "radical". ¿Qué puede decirse que no se haya dicho ya? ¿Qué puede agregarse para comentar a una figura tan querida por todos y que conquistó los corazones del público así, sencillamente, con una imagen de mujer rioplatense que ganó tantos aplausos y que el tango la conserva en su historia para siempre? Beba Bidart fue un pedazo de tango, un jirón de barrio, una estrofa de Discépolo, un acorde de valsesito y un firulete de milonga. Tanto estaba el tango en su vida que cuando tuvo que irse tomó de la mano al Polaco Goyeneche y, el mismo día, partieron juntos, tal vez a cantar un tango allá en los Cielos o a alegrarle un poco la vida a Dios dibujando en las nubes los compases de una milonga de rompe y raja.

Alberto Peyrano
Assessor Musical do Grupo Doce Mistério

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