Os animais amam e tem sentimento.

Numa cidade havia um idoso, que morava com seu cachorro num casebre.

Diariamente pela manhã seu Juca passeava com seu cãozinho.

Porém o dia que seu Juca estava doente, o cachorro saía sozinho no mesmo horário, passeava e retornava sempre observado pelos vi-zinhos, e imediatamente a vizinhança estava visitando seu Juca e providenciando algum remédio.

Certo dia os vizinhos não viram sair seu Juca nem o cachorro e num horário diferente o cão voltou e os vizinhos que praticamente con-versavam com ele, aproximaram do cachorro e através de gestos e sinais, tentaram animá-lo, pois além da tristeza o mesmo recusou alimentar-se, então um dos vizinhos levantou o animal chamou-o para passear colocando o cachorro adiante e o vizinho atrás, o cão entrou numa mata próxima acompanhado pelo vizinho, em certo lugar o cachorrinho parou, lá estava seu Juca sem vida e picado por uma serpente.

As autoridades Municipais junto com a vizinhança sepultaram Seu Juca com muita honra e respeito,

No dia seguinte e no mesmo horário o cão era sepultado na mata em que a víbora havia picado seu Juca e seu cãozinho.

 

Valeriano Luiz da Silva
Anápolis – GO - 13/10/2004

Versión em español: Terry Fernandes

La muerte del señor Juca y de su Perro (Cuento)

Los animales aman y tienen sentimientos.

En una ciudad había un anciano que vivía en una choza con su per-rito.

Todas las mañanas el señor Juca paseaba a su perrito.

Pero cuando el señor Juca se encontraba enfermo el perrito salía a pasear solo a la hora de costumbre, siempre observado por los ve-cinos, de este modo el vecindario se enteraba que el señor Ju-ca estaba enfermo y se apresuraban a visitarlo y incluso a llevarle algún medicamento.

Cierto día los vecinos no vieron salir ni el señor Juca ni el perrito, a una hora distinta de la habitual vieron al perrito, y los vecinos que prácticamente hablaban con el, se acercaron, y por medio de señas, intentaron animarlo, ya que además de la tristeza que pre-sentaba, no quiso ni comer, entonces uno de los vecinos se dis-pone a seguir el perrito, el triste perrito seguido por el vecino ca-mina hasta llegar al monte, en un determinado lugar el perrito paró y el vecino encontró el señor Juca sin vida, le había mordido una serpiente.

Las autoridades locales, juntamente con el vecindario enterra-ron al señor Juca com todos los honores y respeto.

Al dia siguiente y a la misma hora el perrito era enterrado en el monte en que la serpiente había mordido al señor Juca y a su per-rito.

Valeriano Luiz da Silva
Anápolis – GO - 13/10/2004